¿Tu perro es un petardo?

Como ya sabrás, vivo en Barcelona.

Cada verano, la gente aquí celebra algo llamado la noche de San Juan y encienden grandes hogueras en la playa, contaminando el océano y asustando a los animales y a la gente con petardos MUY ruidosos. Suena genial, ¿verdad? A estas alturas estoy bastante seguro de que sabes lo que siento sobre los petardos y la gente que no recoge su basura, pero ya basta de eso.

Cada San Juan escuchamos historias sobre perros aterrorizados, que se escapan y que la gente tiene que escapar de la ciudad para mantener a su perro a salvo.

¿A qué más pueden tener miedo los perros? A OTROS PERROS.

Evito los pipicans por muchas razones, pero muy a menudo también tengo que evitar los espacios públicos.

¿Por qué?

Porque a menudo trabajo con perros que tienen miedo de otros perros, y por eso tenemos que caminar por estacionamientos vacíos y otras áreas donde nadie quiere ir.

Al igual que algunos de vosotros debéis huir de Barcelona para escapar de los petardos, otros dueños de perros tienen que mantenerse alejados de muchas de las bonitas zonas de nuestra ciudad, sólo para mantener a todos a salvo.

Si deseas ser parte de la solución y ayudar a nuestra comunidad canina, aquí tienes dos sencillos consejos:

1. Pregunta siempre si su perro puede saludar antes de permitirle correr hacia desconocidos y sus perros.  

2. Si tu perro no te escucha 100% cuando esté suelto, manténlo con una correa larga.  

Y ahora, la hora de la verdad, pregúntate con quién te quieres identificar:

Persona A: "Creo que mi perro y yo somos más importantes que los demás, si alguien tiene problemas con su perro es su problema, no el mío". Recuerda, TODOS LOS PERROS MUERDEN, solo necesitas pulsar las teclas correctas, y el próximo perro extraño al que sorprenda por detrás podría pulsar exactamente las teclas que provocarán una mordida.

Persona B: “Me preocupo por otras personas y sus perros, nunca querría asustar o lastimar a otro perro dejando que mi propio perro corra hacia ellos sin permiso.“

Si eliges ser la Persona B, tu comunidad canina te lo agradece. Ayudas a las personas y a sus perros a rehabilitarse y avanzar juntos hacia una vida más saludable. Si ayudas a personas que quizás ni siquiera conoces a pesar de que esa correa larga te molesta muchísimo, realmente eres el héroe/heroína para algunos perros. Lleva esa capa con orgullo y créeme, TE APRECIO.